Incrementar las ventas con aromas de alimentos

El uso de esencias y aromas de comida adecuados incentivan el consumo, las ventas y ofrecen excelentes resultados en una cafetería, panadería, restaurante e incluso, en una tienda de cosméticos. En este artículo te contamos cómo las atractivas fragancias de alimentos pueden ayudarte en tu negocio.

Marketing olfativo en restaurantes y cafeterías

Está demostrado que la liberación de ciertas fragancias alimentarias activa nuestro sistema límbico e incrementa las consumiciones. Imaginemos el aroma a café recién molido en una cafetería, el aroma dulce a caramelo en una pastelería o el de productos frescos en un restaurante.

El marketing olfativo y el uso de esencias y aromas adecuados genera muy buenos resultados de promoción y consumo en restaurantes y cafeterías. Así lo atestiguan numerosos estudios, que han demostrado que el uso de esencias y aromas personalizados para cafeterías puede aumentar las ventas de alimentos. Encontramos la respuesta en el sabor de la comida, que está directamente relacionado, influenciado e intensificado por el aroma que lo acompaña. Del mismo modo, el aroma puede estimular el apetito y el olor de nuestros alimentos favoritos aumenta las ganas de consumirlo.

Un sistema de difusión para fomentar ciertos aromas es una excelente solución. De hecho, esta forma de marketing se utiliza a diario en restaurantes, hoteles y tiendas. Se trata de una poderosa técnica para atraer a los clientes de forma silenciosa, sutil y poco invasiva, pero absolutamente efectiva. Por este motivo, la industria alimentaria está aprovechando al máximo esta táctica. A continuación, te mostramos cómo utilizar los aromas a comida para aumentar las ventas de tu negocio.

Uso de fragancias de alimentos y consumo

Estimulación del apetito

El olor de magdalenas recién horneadas en una cafetería puede aumentar las ventas de alimentos debido a la respuesta de hambre que produce en nuestro cerebro. Por otro lado, también se ha demostrado que el olor del pan aumenta las ventas de la panadería, al igual que las palomitas en el cine hace caigamos rendidos ante ellas o la esencia a vainilla en una tienda de cosméticos.

El marketing olfativo alimentario consigue que volvamos a conectar con los clientes por medio de los sentidos y los instintos más primarios.

Un estudio realizado por Cornell demostró que, aunque una persona se encuentre completamente saciada, el apetito puede ser estimulado simplemente por la visión o el olor de un alimento deseable.

La respuesta bioquímica consiste en que los olores generan hilos de memoria en el cerebro que consiguen transportarnos a la primera vez que se experimentamos un determinado aroma, ya que el sentido del olfato humano es el único de los cinco que está directamente conectado con el sistema límbico, el responsable del control de la formación de la memoria y el desarrollo emocional.

Por otro lado, algunos estudios han revelado un fenómeno conocido como "hambre hedónica", una condición que se caracteriza por una sensibilidad a las señales de comida, independientemente de la presencia del hambre. Lo que en último término consigue activar el apetito y las ganas de consumir y, por ejemplo, aumentar el número de pedidos en un restaurante o acompañar el café con un dulce. Aromas como el toffe, el cacao o la vainilla pueden hacer las delicias del paladar desde el olfato.

Atracción de los clientes

Un olor a café aromático liberado cerca de la puerta podría atraer al tráfico de paso o animar a los comensales a quedarse a tomar un postre. También podemos infundir aromas relacionados, como la hierba de limón o la lima, para crear un ambiente adecuado y complementar determinados sabores consiguiendo una experiencia mucho más completa.

Algunas de las fragancias alimenticias que mejor funcionan son la canela, el toffe, la manzana, los cítricos o la vainilla. ¡Descubre en nuestra carta de aromas las esencias comestibles que aumentarán tus ventas!